sábado, 24 de octubre de 2009

LA ASIGNATURA PENDIENTE


La reforma de la Ley Electoral, (LOREG ), que data de 1985, se ha convertido en la asignatura pendiente de nuestra Democracia, es una Ley "desigualitaria", " antidemocratica", e " injusta con los ciudadanos".

Esta Ley se hizo en un principio pensando en fomentar el bipartidismo para así pasar sin ningún problema de la dictadura a la democracia, pero ahora, resulta una Ley insostenible e insoportable en términos democráticos.

La actual Ley Electoral, beneficia claramente al PP y al PSOE, aparte de a los partidos nacionalistas, que con el sistema de adjudicación de escaños, al que se le aplica la ley d´ Hont, a estos partidos les supone unos 70000 votos por escaño, mientras que a formaciones como UPyD o IU les cuesta más de 250000 votos, por lo que se puede afirmar con rotundidad que el resultado de las elecciones se ve condicionado con el tamaño población de cada una de las 52 circunscripciones.

La reforma de la Ley Electoral, esta en manos, desde hace tiempo, del Consejo de Estado, con las propuestas de molificación de la Ley, pero el Gobierno la tiene "aparcada". Con esta reforma se trata en definitiva, de que haya justicia y que los votos de los ciudadanos valgan lo mismo, ya sea en Madrid, Bilbao, Valencia, Barcelona o Zamora, hablamos de algo tan importante, básico y constitucional como es defender la igualdad, puesto que los ciudadanos que tienen la osadía de votar a los partidos minoritarios estatales, se ven discriminados de forma clara y concisa.

Con la reunión mantenida el pasado Jueves entre el Coordinador de IU Cayó Lara y la líder de UPyD Rosa Diez, ambos partidos claramente perjudicados por la actual Ley Electoral, se coloca la pelota en el tejado del Gobierno para que este mueva ficha, y saque del "aparcamiento" las propuestas de molificación de la Ley Electoral.

lunes, 12 de octubre de 2009

LOS IMPUESTOS EN HUMANES


Un 20%,esa es la media de subida del impuesto de la contribución en Humanes de Madrid para este año, impuesto que ya el año pasado se vio incrementado en otro tanto.

Esta subida, que ya de por si, se antoja como un verdadero asalto, un atraco, en plena época de crisis, para las maltrechas carteras de los contribuyentes, se ve agravado si colocamos en la balanza, por un lado el pago de impuestos y por otro, los beneficios sociales que el ciudadano recibe a cambio.

La balanza, en el caso de Humanes, caerá, invariablemente y con rotundidad del lado del coste de los impuestos.

Porque lo verdaderamente bochornoso, lo indignante, es comprobar que de nuestros impuestos, no obtenemos ningún beneficio social, es decir, no se invierte en educación, ni en sanidad ni en obra social, no se dedican estos impuestos a terminar de una vez por todas obras empezadas y nunca acabadas, no se dedica a dotar, por ejemplo, adecuadamente la única biblioteca de la que dispone el Municipio,los servicios de limpieza, de alumbrado publico y de alcantarillado dejan mucho que desear,nuestra Policía Municipal no cuenta con infraestructuras adecuadas, la piscina de verano( de la de invierno no hablamos ) de la que disponemos, es a todas luces mejorable, pues esta descuidada tanto en instalaciones como en la calidad y cuidado del césped y de su vallado, en definitiva también es mejorable en la calidad del servicio prestado.

Todos estos factores unidos hacen que los vecinos nos preguntemos: ¿donde van a parar nuestros impuestos?,¿ se dedican nuestros impuestos a pagar deudas contraídas con anterioridad?.

Afortunadamente, y lejos de lo que nuestro Consistorio piensa, los contribuyentes no somos,
ni tontos, ni lelos ni imbéciles, sabemos pensar, sabemos lo que queremos y queremos lo que sabemos, y nos damos cuenta que nuestro esfuerzo y sacrificio para contribuir con nuestros impuestos al desarrollo del Municipio, no se ve correspondido de ningún modo.

En Humanes, queremos que nuestro dinero, redunde en beneficio social, queremos tener más y mejor calidad de vida gracias a nuestros impuestos,pagamos impuestos de primera categoría y por tanto queremos beneficios sociales también de primera