HUELGA GENERAL

Como trabajador acostumbrado a las estrecheces económicas, al esfuerzo y sacrificio, a vivir con arreglo a mis precarias posibilidades y a que tanto, mi mujer como yo, tengamos, en ocasiones que buscarnos un segundo sueldo para tener y disfrutar de lo imprescindible y legalmente reconocido por la Constitución.( vivienda, educación publica para nuestros hijos y sanidad para nuestras familias), no puedo callar cuando se carga el coste de la crisis en los trabajadores principalmente, mediante recortes de los derechos laborales, precarizando, más aún, las condiciones de trabajo, dejando en manos de los aventureros de la cultura del pelotazo, del beneficio rápido y fácil, mi futuro, el de mis hijos y el de mis nietos, trabajando en un día de huelga general.

Se, y así lo he dicho muchas veces, que los sindicatos, no son trigo limpio, que la mayoría son vividores subvencionados, al igual que lo son los partidos políticos, los cuales llevan 30 años evitando la verdadera Democracia para su propio beneficio, y, sin embargo, les votamos cada 4 años acudiendo como borregos a las urnas, en lo que ellos llaman " la fiesta de la Democracia", si, con la nariz tapada, pero acudimos a votarlos.

Pues vale, de acuerdo, con mi decisión de ir a la huelga, estos vividores se aprovechan de la misma manera que lo hacen los políticos corrompidos cuando vamos a votar. Pero eso, el que yo les beneficie con mi actitud, es lo menos importante. Para mi, lo importante, es mi conciencia de obrero y mi dignidad de trabajador pisoteada por el mayor atentado a las conquistas laborales que se han perpetrado en este país, con el agravante de que esta reforma a sido redactada y ejecutada por un Gobierno, cuya responsable del asunto, no sabe lo que significa trabajar, puesto que no ha trabajado jamas en empresa, ni publica ni privada alguna, tan solo en cargos políticos dentro de su partido.

Así, se puede entender facilmente la insensibilidad de semejantes personajes.